Las vacaciones nos obligan a los cambios. Cambios de horario, cambios de dieta, cambio de lugar.

Lo mismo pasa cuando las vacaciones son «temáticas», y estas lo fueron. Nos fuimos a Europa con el objetivo de recorrer mercerías, lanerías, y negocios 

El primer destino: Roma, Italia.

Cada rincón de Roma inspira. Los colores de las paredes, los arreglos florales, de todo se puede buscar la inspiración para lograr nuevas combinaciones de colores. 
El colorado de los Pinochos de madera, podría usarse para seleccionar telas de patchwork, o lanas.
Las calles redondas de Roma, nos llevaron por lugares que, a veces, no estaban en los mapas. Y en esas calles encontramos algunos tesoros, como el sillón de un negocio vintage realizado con flores tejidas al crochet, a modo de funda…
…Un negocio que vendía cuellos de puntillas, relojes y dibujos. 
Alrededor del hotel, ubicado cerca de la Fontana de Trevi, había varios almacenes con exquisiteces. De ello dan testimonio los pistachios y los «kits para la cena» que tenían todo lo necesario: fideos, aceite de oliva y queso para rallar.
Partimos hacia las mercerías, y llegamos hasta «Branciforte».
e hicimos algunas compras…lanas italianas, agujas Milward de tejer y de crochet, bolsas para guardar las labores.

Algunas vidrieras utilizan el tejido para decoración. Aquí se ven dos agujas enormes con una bufanda de lurex en punto Santa Clara.
También majestuosos bordados hechos a mano, con mucho humor.

Y por supuesto, siempre hay un poco de Street Art…En un negocio de ropa, encontramos esta cartera «abuelita«, y le pedimos a su dueña que la mostrara para la foto.
La tarde en el Vaticano nos mostró la mejor cara del Papa Francisco en las postales que se ofrecen alrededor de la Plaza San Pedro. 
Hasta la próxima. Continuará….
Bicha